(Fuente: Diario de Ávila)
Todavía queda más de un año, pero ya son muchas las personas que se han mostrado su interés para ayudar en los actos organizados en Ávila los días previos a la celebración en Madrid de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), a la que acudirá el Papa Benedicto XVI.
Pero todavía hacen falta más voluntarios dispuestos a ayudar a las más de 8.000 personas que está previsto que, desde el extranjero, acudan a Ávila entre el 15 y el 22 de agosto del año que viene. Por esto, desde el Secretariado de Pastoral Juvenil se pide a la sociedad abulense que se vuelque con la celebración de unas jornadas que, como asegura Jorge Zazo Rodríguez, director de la Pastoral Juvenil, se puede convertir en «la mejor campaña de publicidad posible» para Ávila.
Serán, además, en opinión de Zazo Rodríguez, el mejor aperitivo posible para la celebración en 2015 del V Centenario de Santa Teresa. Pero desde el Obispado se sabe que para que todo salga a pedir de boca se necesita la ayuda de los abulenses. «Con independencia de su edad o de su condición religiosa», recalca el sacerdote, que no quiere excluir a nadie de la organización de unos actos que traerán a la provincia a 5.000 jóvenes peregrinos entre el 11 y el 15 de agosto y a otros 3.000 el 22 de agosto, una vez que haya concluido la Jornada Mundial de la Juventud. «Se trata de un grupo de la diócesis de París, que no pudimos acoger los días previos a la JMJ pero que no querían quedarse sin conocer la tierra de Santa Teresa», explica Zazo Rodríguez.
Los 5.000 peregrinos que acudirán a Ávila los días previos a la JMJ (de los cuales, 3.800 ya han confirmado su presencia) se repartirán entre la capital (unas 3.000 personas) y la provincia. Pero todos necesitarán la presencia de voluntarios que les acompañen en sus desplazamientos por la ciudad, les distribuyan las comidas y el material necesario en las catequesis y retiros, o sean sus traductores, entre otras funciones.
Aquellos que acudan a la capital dispondrán de tres posibilidades de alojamiento: en centros de la Iglesia (sobre todo colegios, como La Milagrosa, los diocesanos o Las Nieves); en espacios municipales, como los pabellones de San Antonio o Carlos Sastre y para lo que la diócesis cuenta ya con la buena disposición del Ayuntamiento; y en familias de acogida, para lo que los organizadores piden de nuevo la implicación de la sociedad abulense. «En este caso se tendrá que acoger como mínimo a dos peregrinos, siempre mayores de edad», aclara dos de las características de este tipo de acogimiento, tan necesario para la organización del evento.
Y si en algo insiste el sacerdote es en recalcar que todo abulense puede ayudar en la organización de un evento que como él mismo considera se convertirá en una buena fuente de ingresos para la ciudad. «Para nosotros, evidentemente, eso no es lo más importante, pero es un aspecto que tampoco puede olvidarse», reconoce Zazo Rodríguez, que habla de dos objetivos desde el punto de vista religioso: que los jóvenes peregrinos se preparen espiritualmente para su posterior encuentro con el Papa y que se dinamice la Pastoral Juvenil de Ávila.
En este sentido, desde el Secretariado de Pastoral Juvenil se invita a los jóvenes a participar como voluntarios con tres argumentos. «El primero es el de la fe, porque el objetivo es que en las jornadas se descubra que se puede ser cristiano y joven en el siglo XXI, que no son términos contradictorios», argumenta el director del Secretariado, que valora muy positivamente el hecho de que los jóvenes abulenses se encuentren con jóvenes de otros países que comparten sus inquietudes. «En segundo lugar se trata de demostrar que se puede vivir de otra manera siendo joven», continúa Zazo Rodríguez que, argumenta que es positivo que los jóvenes se encuentren con jóvenes de otras culturas.
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